Por muchos años estuve en un laberinto obscuro llamado depresión. Había un vacío en mi vida sin explicación aparente, la tristeza me invadía y mi actitud derrotista no me ayudaban a buscar una solución. Fue extraño porque aunque habían días donde tenía ganas de comerme el mundo y hacer las cosas que me gustaban, mi estado de ánimo era débil y saboteador, el resultado era de frustración conmigo mismo por encontrarme en la misma situación que algunos decían que era flojera, dejadez y la verdad eso me incomodaba. Debo comentar que en ese momento no sabía lo que me pasaba, el tema de la depresión estaba presente sin yo saberlo. Un buen amigo un día me comentó que indagara un poco sobre la depresión y sus síntomas y eso hice. Fue la mejor sugerencia que me hayan podido dar porque el primer enemigo de la depresión es reconocer que existe en quien la padece. Hablar de depresión es algo que pertenece a los expertos en la materia, sin embargo hago un paréntesis desde mi condición vivencial. Ahora bien, algo que me ayudó fue buscar ayuda evitando recurrir a los fármacos, hay medicina alternativa como las flores de Bach que puede ser una opción, otro enemigo de la depresión y algo muy alentadora para mi fue estar con gente positiva y de buena vibra, también leer libros motivacionales me levantaban la esperanza y me hacían sentir mejor. En fin, hoy día cuando me encuentro algo decaído, me recuerdo que tengo aliados para subir los ánimos y combatir la depresión.
En amistad.
Arnaldo López Vivas
Creador de TuExitoSeAprende
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